Una menor aportación de recursos en la producción es de una importancia clave para la protección de nuestro medio ambiente. Disminuye las emisiones de CO2 y reduce el vertido de aguas residuales y de residuos.
El sector industrial en Euskadi consume 21 millones de toneladas de materias primas al año, de las cuales un 77% son importadas. Genera el 72% de los residuos y de ellos un 42% acaban en vertedero. La transición hacia una economía más circular ofrece por lo tanto grandes oportunidades para Euskadi. Es importante para modernizar y transformar la economía, avanzando en una dirección más sostenible.
El menor uso de materiales tiene como objetivo reducir la dependencia de nuestra economía de la extracción e importación de materias primas así como reducir la generación de residuos.
Lograr más con menos,
es el principio básico de la economía circular.